lunes

Misa del 8 de Junio de 2008
Recuerdo a mi Tata
Misa por Papá

Quien no recuerda a su papá, quien no ve al mirarse al espejo, gestos, expresiones, parecidos físicos que le recuerdan a ese ser tan dulce que es... PAPÁ.
Algunos tenemos la gracia de tenerlo a nuestro lado... otros guardan en su corazón los recuerdos de ese ser tan querido que ha partido al más allá.
Hay un Papá de Papás, un Graaaaan papá, Misericordioso, siempre bondadoso, lento para la ira, amoroso con los hijos que se alejan... y luego vuelven.
Dios es ese padre, que al volver luego de mucho tiempo de haberlo negado, nos abre sus brazos por completo.

Recordar la importancia de los Papás en nuestra vida
Papá, es una presencia que nos marca la vida. El padre Roberto nos propuso a través de distintos signos una cosa muy simple.
Cada uno de nosotros llevó la foto de papá, y el padre nos propuso imaginar que esa foto la ubicábamos dentro de un retrato... ahí estaba papá.
Luego nos mostró un equipo de mate, "¿que es el mate para cada uno de nosotros?... lo que para mi simboliza es el compartir.
¿Quien no tomó un mate con el viejo, mientras charlaba?". Es símbolo entonces de la presencia con que hemos compartido muchas cosas.
Será que esta era una ocasión para que de nuevo se hiciera presente la presencia de papá, será que esta sería la oportunidad de hablar con papá... en paz... con la presencia de un mediador que es indiscutible...
Más alto... la presencia que nos convoca... aquel que nos ha invitado a esta Mesa de Memorial... Cristo Eucaristía.
¿Donde ponemos a Papá? ¿a los pies del "Amado"? (Jesús)... ¿por debajo en un pedestal?... ¿en el suelo?... o acaso lo ponemos en el piso boca abajo.
Jesús, dulce Nombre que aquieta las almas, dulce Nombre que aquieta las aguas de la furia y el dolor... y sana nuestros recuerdos.
Según mi humilde entender esta fue la idea en que se centró la presente Misa; la sanación del recuerdo de papá.

Papá Dios
Estar en los brazos de Papá

Este fue un día especial, para hijos y padres

El Padre iluminó a través de la palabra, con la parábola del hijo pródigo.
lc 15, 11-32
Dijo Jesús : «Un hombre tenía dos hijos; y el menor de ellos dijo al padre: ´Padre, dame la parte de la hacienda que me corresponde.´ Y él les repartió la hacienda. Pocos días después el hijo menor lo reunió todo y se marchó a un país lejano donde malgastó su hacienda viviendo como un libertino. «Cuando hubo gastado todo, sobrevino un hambre extrema en aquel país, y comenzó a pasar necesidad. Entonces, fue y se ajustó con uno de los ciudadanos de aquel país, que le envió a sus fincas a apacentar puercos. Y deseaba llenar su vientre con las algarrobas que comían los puercos, pero nadie se las daba. Y entrando en sí mismo, dijo: ´¡Cuántos jornaleros de mi padre tienen pan en abundancia, mientras que yo aquí me muero de hambre! Me levantaré, iré a mi padre y le diré: Padre, pequé contra el cielo y ante ti. Ya no merezco ser llamado hijo tuyo, trátame como a uno de tus jornaleros. Y, levantándose, partió hacia su padre. «Estando él todavía lejos, le vió su padre y, conmovido, corrió, se echó a su cuello y le besó efusivamente. El hijo le dijo: ´Padre, pequé contra el cielo y ante ti; ya no merezco ser llamado hijo tuyo. Pero el padre dijo a sus siervos: Traed aprisa el mejor vestido y vestidle, ponedle un anillo en su mano y unas sandalias en los pies. Traed el novillo cebado, matadlo, y comamos y celebremos una fiesta, porque este hijo mío estaba muerto y ha vuelto a la vida; estaba perdido y ha sido hallado.´ Y comenzaron la fiesta.«Su hijo mayor estaba en el campo y, al volver, cuando se acercó a la casa, oyó la música y las danzas; y llamando a uno de los criados, le preguntó qué era aquello. El le dijo: ´Ha vuelto tu hermano y tu padre ha matado el novillo cebado, porque le ha recobrado sano.´El se irritó y no quería entrar. Salió su padre, y le suplicaba. Pero él replicó a su padre: Hace tantos años que te sirvo, y jamás dejé de cumplir una orden tuya, pero nunca me has dado un cabrito para tener una fiesta con mis amigos;y ¡ahora que ha venido ese hijo tuyo, que ha devorado tu hacienda con prostitutas, has matado para él el novillo cebado!´ «Pero él le dijo: ´Hijo, tú siempre estás conmigo, y todo lo mío es tuyo; pero convenía celebrar una fiesta y alegrarse, porque este hermano tuyo estaba muerto, y ha vuelto a la vida; estaba perdido, y ha sido hallado.´



¿Que nos trasmite el Señor a través de su Palabra?, voy a tratar de transmitirte lo que personalmente siento que me deja como enseñanza (es decir esta es una opinión personal).


Cuantas veces huimos del abrazo amoroso del padre, porque no nos dio lo que esperábamos, como creyendo que tiene un servicio Express de milagros a nuestra disposición. Entonces reunimos todo lo que nos dio y nos alejamos del dulce hogar, que es la iglesia.
Luego de que Dios nos dio todo… lo despreciamos, llevamos una vida alejada de todo lo que él nos enseñó. En sí la vida alejada de la casa es más fácil… he! Yo hago lo que quiero… total ya no están esas molestas reglas que me imponen, ahora ¡EL MUNDO ES MÍO!.
Entonces probamos todo… es como una de esas mesas dulces con todas esas cosas ricas que ponen en las mesas… ¡huuuummm! todo parece tan delicioso… que bueno!!!! No hay límite… comemos… comemos… y comemos…
y luego que nos atracamos de comida… llega ese profundo dolor de estómago resultado del atracón que nos pegamos.
¿será que en la vida nos pasa lo mismo?, una vez que nos vamos de las manos de Dios, comenzamos a buscar la mesa dulce de la vida, pero todo lo que encontramos son bocados vistosos, pero han sido hechos con crema en mal estado. Comemos… comemos… y volvemos a comer de aprovechadores, que nos roban, nos sacan el dinero… y al final continuamos sintiéndonos peor de lo que llegamos.
Ahí están… curanderos con sus bolsitas… la cartomancia, con los que nos adivinan la suerte… el umbandismo que promete hacerle mal al que te lo hizo, cuando ese mal en realidad cae sobre tu cabeza, porque Dios te reclamará a ti el mal que has encargado a tu hermano. En ocasiones caminamos por sendas de maleficios, críticas, chismes, confabulaciones , hechizos, encantamientos , ardides, brujería , ataduras , trampas , engaños , mentiras , ponemos obstáculos, nos atamos a cadenas espirituales o influencia espirituales. Así tratamos de saciar el hambre de Dios
Así terminamos convirtiéndonos en menos que animales.
Deseamos llenarnos de felicidad, de amor, pero todo lo que obtenemos al seguir este camino de oscuridad y egoísmo, es vacío y más dolor .
Entonces miramos atrás , levantándonos, volvemos a nuestro Padre. Estando todavía lejos, conmovido Nuestro Padre nos vé, y se echa a nuestro cuello y nos besa efusivamente. ¿ acaso le decimos a Dios las palabras que le dijo el hijo a su padre?
Padre, pequé contra el cielo y ante ti; no merezco ser llamado hijo tuyo.
¿No es lo indicado tener la humildad de reconocer ante Dios nuestro error?.
Estando Verdaderamente arrepentidos, Dios nos reviste con blancas vestiduras, nos pone un anillo en la mano, símbolo de alianza con él, y sandalias en los pies para emprender de nuevo camino correcto.
El nos alimenta nuevamente con su palabra de amor que bendice y fortalece nuestra vida.
El Padre nos recibe con amor, se alegra enormemente de haber recuperado a su hijo amado.
No lo dudes mi querida ovejita, Dios te ama… eres precioso a los ojos de Dios, si has fallado no importa… pide perdón a tu Señor, preséntate humilde de corazón, pídele perdón... y déjate rodear por los brazos de Jesucristo rey de reyes y redentor del mundo.
Él es el Amado… y te ama más que nadie… Tú eres su perla más preciosa y aunque te pierdas, el te buscará y te encontrará, como el Pastor busca la oveja perdida que se ha separado del rebaño. Si encuentra a su pequeña oveja agotada… la levanta y la toma entre sus brazos y la carga hasta el camino seguro.
Luego, en la Palabra aparece la figura del hermano mayor, y aparece una actitud que a veces surgen de nuestras propias expresiones que nos causan escándalo y es parecida a esta:
¡coooooomo!... ¿aquel que robó, que mintió, provocó dañó merece también el amor de Dios?.
Si hermano… aquel que se escapó de la mano amorosa de Dios y de Nuestro Señor Jesucristo, y se puso en las manos equivocadas merece tanto o más amor que tú, pues ese hermano necesita volver a sentir la Presencia de Jesús en su vida y en su corazón.
Acaso... ¿no recuerdas que en mayor o en menor medida hemos sido como él?. No nos damos cuenta, que alguna vez le hemos fallado al Tata Dios…
Pero supongamos que mi santidad y benevolencia es muuuuuuuy grande, y lo único que me falta es una aureola, para ser elevado a los altares.
¿Quien necesita la salvación?... el bueno… o el pecador. ¿Quién necesita volver a la vida?, ¿Quién es el que estaba perdido?.
Hermanos en Cristo y María Santísima, no nos equivoquemos… ni los Santos han sido perfectos… porque la perfección es Divina… es solo reservada a Dios, a Él Alabanza, Honor y Gloria... ¿y a los Santos?... Veneración por el esfuerzo de tratar de ser reflejo de Jesucristo y mostrar amor a sus hermanos en esta tierra.

Sanar las Heridas
Muchos tenemos la Gracia de tener a Papá y otros ya no pueden gozar de su presencia física. Muchas veces quedan algunas heridas, que no hemos podido subsanar en vida, y cuando papá pasó a la gloria no hubo tiempo de intercambiar perdones.
Por ello creo que es una linda oportunidad para que recuerdes a papá, y le pidas perdón y le perdones. Te sugiero llevar una mano a tu corazón y sigas atentamente esta oración.

OREMOS AL SEÑOR
Dulce Jesús... Hoy te pido me dejes manifestar a Papá todo lo que hay en mi corazón, hazlo presente nuevamente en mi recuerdo para que pueda expresarle todo mi sentir.


Señor mío... Hoy quiero que através de esta oración pueda reconciliarme con él, quiero pedirle perdón por mis errores, y sentirme perdonado por aquellos dolores que le infringí.


Pido perdón por las ocasiones en que te traté injustamente, por esos momentos en que no pude comprenderte, que mi paciencia se desbordó, y te provoqué dolor o angustia al ignorar tus sabios consejos.


Por eso papá te pido perdón.


Te quiero expresar papá, que perdono tus enojos, en especial... (pensá ese recuerdo que tanto te hiere), momento que me provocó mucha angustia, y me sentí mal...

por eso hoy quiero perdonarte.


Me acuerdo de aquella ocasión en que me dirigí a vos con palabras ofensivas, o que te agredí verbalmente, por eso quiero pedirte perdón, la razón que motivó tanto enojo fue que... (hacé presente en voz alta la razón de tu agravio), se que no es justificativo pero en aquel momento no pude controlar mi ira.


Perdón papá no era mi intención dañarte.


Te perdono por esas palabras hirientes que tuviste hacia mí, no se que motivó aquellos exabruptos, soy consiente de los pesares que te provocaba el trabajo, hoy comprendo el peso que es llevar adelante una familia, o tal vez fue que nunca tuviste el amor que necesitabas durante tu infancia, por eso hoy quiero perdonarte por todo ese dolor que guardo en mi interior.


Quiero que me perdones papi porque estando enfermo, te maltraté, tal vez estabas consiente y eso te dolió en lo profundo, tal vez no eras consiente, pero aún así no hay excusa.


Papá me dolía mucho que te fueras de este mundo, sentía quebrado el corazón por dejarte partir, y me dolía verte rendido ante la enfermedad que penosamente te atacaba... y yo... tu hijo tan querido, no podía hacer nada... tal vez te culpé, hoy comprendo que era un hecho natural, y que estás gozando de la presencia del Señor.


Te pido perdón papá si te ocasioné grandes disgustos al verme alcoholizado o drogado, soy o he sido víctima de esa adicción que he superado o tengo la firme intención de superar.


Te perdono papá... por tu adicción al alcohol, por drogarte, o por pegarle a mamá, te perdono de corazón porque entiendo que los dolores de la vida no podías enfrentarlos sin esa bebida destructora, no fuiste consiente que por ella perdiste más amor del que ya habías perdido.


Papá... te pido perdón por haberte abandonado, por dejarte solo... por no estar en el momento que más me necesitabas... tal vez fue un enojo... tal vez mi frialdad de corazón... tal vez mis ocupaciones me impidieron estar a tu lado... y te fuiste, sin poder mediar palabras... sin que te pudiera despedir, y eso... me duele en el alma.


perdón Papá.


Te perdono papá... porque no pude conocerte, me dejaste solo/a , me abandonaste y no estuviste en los momentos dulces de mi vida, y no me apoyaste en los momentos amargos... si supieras cuanto te necesité... si supieras la falta que me hiciste... si supieras el resentimiento que tengo por tu abandono... pero hoy necesito perdonarte, tanto resentimiento me produce angustia... dolor... opresión, me daña y te daña, y pienso que si ambos nos duele... es hora de compartir mas que dolor... paz en nuestro corazón.


No sé si vives... No sé si estás ante la presencia de Dios... pero Hoy yo decido perdonarte.


Papá cerca de ese día tan especial para los padres, quiero reconciliarme con vos, quiero perdonarte y sentirme perdonado... te AMO...


Ahora Señor, Papá del cielo... te pido perdón por mis faltas y desatenciones como hijo... y te pido especialmente Perdones a Papá por sus errores...


Gracias Señor por concederme este momento de encuentro con vos... y con papá... Gracias Señor por todo lo que me has dado, y te pido que me concedas amor y humildad para pasar todas las pruebas que me pone la vida.






Señor tu discípulo quiero ser...


AMÉN













Espacio para un Papá especial


Este Espacio lo quise guardar para un Papá que es digno de tener un pequeño homenaje en este blog.
No es el mío... pero es un papá que de seguro debió hacer un renunciamiento muy importante.
En el se refleja la entrega dolorosa de muchos Papás, que ven a sus hijos arriba de un altar.
seguramente a medida que pasó el tiempo comprendió que esa entrega no había sido en vano... me tomo el atrevimiento de hablar por todos...
Nosotros Tus nietos espirituales, te agradecemos que nos regalaras este sacerdote...
Loco...
por Cristo
Santo...
por su entrega
Fiel...
por su amistad
Frontal...
porque muestra una realidad sin esconderse
Apasionado...
por poner todo para exaltar el Dulce nombre de Jesucristo Nuestro Salvador

Este espacio está dedicado al Papá del Padre Roberto Barchietto, nuestro abuelo espiritual que hoy goza de la paz y Gloria del Señor.

MINISTERIO DE MÚSICA MANANTIAL

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